Ecuador aprueba histórico acuerdo comercial con China: Apertura de nuevos horizontes económicos

En una decisión trascendental, la Asamblea Nacional de Ecuador ha ratificado un acuerdo comercial con la República Popular China, estableciendo así un hito en las relaciones económicas entre ambas naciones. Con un respaldo mayoritario de 76 votos de un total de 137, el Tratado de Libre Comercio (TLC) suscrito entre los dos países en mayo de 2023 ha sido oficialmente avalado, allanando el camino para un intercambio comercial más fluido y beneficioso.

El debate legislativo que precedió a esta histórica votación estuvo marcado por un intenso análisis de las implicaciones y ventajas del acuerdo. La ministra de Producción, Sonsoles García, respaldada por exministros y representantes del sector productivo, enfatizó los potenciales beneficios que este acuerdo traerá para Ecuador. Se proyecta que la entrada en vigor del TLC genere la creación de más de 50,000 empleos y un impresionante crecimiento del 32% en la oferta exportable del país.

Uno de los aspectos más destacados del acuerdo es el acceso preferencial al vasto mercado chino, compuesto por más de 1,400 millones de personas. La eliminación inmediata de aranceles para productos emblemáticos ecuatorianos, como la fruta pitahaya, representa un avance significativo en la promoción de las exportaciones del país. Además, se abren nuevas oportunidades para sectores como la carne congelada, el té, los arándanos, y una variedad de productos agrícolas que forman el corazón de la economía ecuatoriana.

Si bien el acuerdo ha sido ampliamente respaldado, no ha estado exento de críticas y preocupaciones. Voces disidentes, como la del legislador indígena José Agualsaca, advierten sobre posibles repercusiones negativas, incluida una mayor competencia que podría afectar a la industria nacional y a los pequeños productores. Sin embargo, la ministra García asegura que se han tomado medidas para proteger sectores sensibles, con la inclusión de 820 exclusiones y plazos prolongados de desgravación.

Otro punto de controversia se centra en la presencia de flotas chinas en la zona económica exclusiva de Galápagos, una preocupación que ha sido expresada por diversas autoridades y organizaciones. A pesar de estos desafíos, el acuerdo representa un paso significativo hacia una integración más profunda de Ecuador en la economía global, consolidando su posición como un actor relevante en el escenario internacional.

La aprobación del TLC con China marca un hito histórico para Ecuador, abriendo nuevas perspectivas económicas y comerciales en un mundo cada vez más interconectado. Este acuerdo refleja la voluntad del país de fortalecer sus lazos internacionales y aprovechar las oportunidades que ofrece el mercado global.